El clima en PITANGA (Brasil) ha echado por tierra las ilusiones de "Un cerezo en la maleta". En 2008 viajó volando dentro en una maleta, y la última noticia que tuve de su progreso fue que en la primavera brasileña de 2011 y seguía vivo
Febrero de 2015: llevaba tres años sin noticias. Pregunté por él y mis presagios se cumplieron. Aquel mismo año (2011), llegó el invierno, el arbolillo perdió sus hojas, se quedó desnudo... y ya no volvió reverdecer.
Hoy Domingo 8 de febrero de 2015, en el suplemento número 622 HERALDO DOMINGO, Reportaje: NATURALEZA, texto de David Navarro, escribe:
"Sin frío no habría fruta": Almendros, melocotoneros o CEREZOS necesitan bajas temperaturas para florecer... descansan en invierno y despiertan en primavera.
=Pero para poder florecer necesitan pasar por un periodo de frío. Si llevásemos uno de nuestros CEREZOS a Ecuador, por ejemplo, y no pasaran un invierno, no florecería ni daría cerezas= (Javier Rodrigo, investigador y jefe de la Unidad de Hortofruticultura del Centro de Investigación y Tecnología Alimentaria de Aragón ((CITA))
Continúa escribiendo "... pero se intuye que el cerezo, precisa unas 1.000 horas de temperatura por debajo de 7 grados... "
Con estas líneas "despido" al CEREZO que "quiso pero no pudo" conectar Zaragoza con Pitanga.
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